Coldplay: de la banda sonora de mi vida al fenómeno del postureo
Coldplay ha sido, sin duda, una de mis bandas favoritas desde prácticamente sus inicios. Recuerdo aquellos tiempos en los que existía el eMule y se pirateaban CDs: fue ahí donde me topé con su música y, poco a poco, se convirtió en la banda sonora perfecta de mi vida. Su segundo álbum sigue siendo, para mí, una obra maestra. No me tiembla el pulso al decir que lo considero el disco perfecto: melódico, profundo y con esa melancolía que marcó a toda una generación. Canciones que no eran solo temas, sino refugios emocionales. He tenido la suerte de verlos en directo en dos ocasiones: en 2009 en Barcelona durante el Viva la Vida Tour y en 2012 en Madrid, en el antiguo Calderón, donde comenzaron con la famosa tradición de las pulseras luminosas. Experiencias únicas que todavía guardo como tesoros personales. Pero no puedo negar lo evidente: a medida que Coldplay fue haciéndose más comercial, con colaboraciones pensadas claramente para el mercado masivo, quienes los seguimos desde ...